martes, 26 de mayo de 2009



Ahí los tienen. Los tres hombres que en 5 años fueron cambiando mi vida.

Ellos son de quienes les hablo, por quienes lloré y tambiém sonreí.

Lucas, un hombre increíble. Mi primer novio, mi primer amor. Sin duda una persona incomparable. Él me enseñó a amar. Ama la música, toca la guitarra. Es despiadadamente bello, morocho, alto, ojos verdes, con las manos más lindas que vi en mi vida, bohemio.

Nico, el ser más parecido a mi que enconté hasta ahora. Repleto de alegría constante, siempre dispuesto a escuchar y con la palabra justa en el momento ideal. Un tanto impulsivo. Me enseñó a amar con locura, y a hacer locuras por amor. Músico de alma, no hay instrumento que pueda con él. Hermoso, jugador de rugby, alto, morocho, ojos color miel, en su piel incontables lunares.

Walter, si hay hombres raros, él es quien gana. Tímido pero extrovertido. Sensillo y seductor. Presencia que desarma. Una gran persona, jamás olvida un detalle. Me enseñó que no todo es lo que parece, que el amor no es un juego. Lleva la múisica en el corazón, toca la guitarra (su mejor amiga sin duda). Con una belleza única, alto, morocho, ojos profundos, una cicatriz que le da ese toque perfecto.

Ellos, quienes me sacaron el sueño durante muchisimas noches. Los que me hicieron crecer, creer y desconfiar. Muchos razgos comunes, pero personas totalmente distintas, cada uno con sus virtudes y defectos. Hoy, no los tengo, pero les doy las gracias por cada una de las cosas que me dieron, que me enseñaron.

2 comentarios:

  1. es que generalmente es así, la gente que nos quita, nos da... pero no da cuando se va.

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  2. estoy segura de que uno de ellos es "unico" para ti, si lo tienes al lado, cuidalo :)

    beso!

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